Viviendo con TOC: cómo reconocerlo y manejarlo en el día a día

Seguramente alguna vez has escuchado hablar del Trastorno Obsesivo Compulsivo o TOC. Quizás incluso hayas hecho alguna broma sobre ser “muy TOC” porque te gusta que las cosas estén ordenadas o limpias. Pero ¿qué hay detrás de este término? En este artículo, te contamos qué es realmente el TOC, cómo afecta a quienes lo padecen y qué puedes hacer si tú o alguien cercano lo está viviendo.

¿Qué es el TOC? 

El TOC es una condición que va más allá de tener manías o ser perfeccionista. Es un trastorno de salud mental que provoca una gran ansiedad. Imagina que hay pensamientos que no quieres tener pero que no puedes evitar. Estos pensamientos molestos o recurrentes son obsesiones. Y luego están las compulsiones, que son esos actos repetitivos o rituales que la persona siente que tiene que hacer para calmar esa ansiedad.

Por ejemplo, alguien con TOC puede tener la obsesión de que todo está sucio, y para calmar ese miedo, la compulsión sería lavarse las manos una y otra vez. Aunque en el fondo saben que ya están limpias, no pueden parar. Esto no es un capricho, es una necesidad impulsada por el miedo.

Lo que el TOC NO es

Es importante desmitificar algunas ideas erróneas sobre el TOC. Aquí algunas aclaraciones que tal vez te sorprendan:

  • No se trata solo de ser ordenado: Tener el escritorio organizado o querer que las cosas estén en su lugar no significa que tengas TOC. Las personas con este trastorno experimentan una ansiedad tan fuerte que se sienten obligadas a actuar, no porque disfruten del orden, sino porque sin esas acciones sienten un enorme malestar.
  • No es algo que puedes controlar fácilmente: Decirle a alguien con TOC “deja de hacerlo” no es una solución. La persona con TOC no quiere hacer estas acciones repetitivas, pero siente una presión interna muy intensa.

¿Por qué aparece el TOC?

No hay una única razón por la que una persona desarrolla TOC. Hay varios factores que pueden influir, como la genética (si alguien en la familia lo tiene, puede haber más posibilidades) o incluso experiencias de vida estresantes o traumáticas.

A veces el TOC puede aparecer después de momentos difíciles en la vida, como la pérdida de un ser querido o un cambio grande.

Cómo saber si tienes TOC: algunas señales

Es normal tener pensamientos extraños o repetitivos de vez en cuando, pero cuando esas ideas interfieren con tu vida diaria, es cuando hay que prestar atención. Algunas señales de TOC incluyen:

  • Pensamientos que no puedes quitarte de la cabeza, aunque quieras ignorarlos (por ejemplo, miedo constante de que algo malo suceda).
  • Sentir que tienes que hacer ciertas cosas repetidamente para calmar esos pensamientos (como contar, verificar o lavarte las manos varias veces).
  • Dudas constantes sobre cosas simples, como si cerraste bien la puerta o apagaste las luces, que interfieren en el funcionamiento normal de tu vida.

Si esto te suena familiar, no estás solo. Lo importante es que hay formas de manejarlo.

¿Qué hacer si tienes TOC?

El primer paso para enfrentarlo es pedir ayuda profesional. Puede dar miedo al principio, pero un terapeuta especializado puede ayudarte a encontrar maneras de manejar tus pensamientos y compulsiones.

Consejos prácticos si vives con TOC

Mientras trabajas con un profesional, aquí te dejamos algunos consejos que pueden ayudarte en el día a día:

  1. No te castigues: Tener TOC no es tu culpa. Los pensamientos obsesivos pueden ser agotadores, pero culparte solo te hará sentir peor.
  2. Pequeños pasos: No intentes cambiar todo de golpe. Si tienes una compulsión, trata de retrasarla un poquito cada vez. Por ejemplo, si siempre lavas las manos 10 veces, intenta hacerlo 9 veces un día, luego 8.
  3. Habla con alguien: No guardes todo para ti. Hablar de tus preocupaciones con amigos, familia o un terapeuta puede hacerte sentir más apoyado.

Si tienes un ser querido con TOC, esto es lo que puedes hacer

Ver a alguien que quieres lidiando con TOC puede ser difícil, pero tu apoyo es clave. Aquí te dejamos algunos tips:

  • Escucha sin juzgar: A veces, solo escuchar lo que la persona está pasando sin tratar de ofrecer soluciones es lo mejor que puedes hacer.
  • Evita reforzar las compulsiones: Es tentador ayudar a alguien con TOC a calmarse haciendo lo que te piden (como verificar por ellos si la puerta está cerrada), pero esto puede empeorar las compulsiones a largo plazo.
  • Anímales a buscar ayuda profesional: El apoyo emocional es importante, pero el tratamiento profesional es fundamental.

Vivir con TOC no es fácil, pero con el tratamiento adecuado y el apoyo de tus seres queridos, es posible llevar una vida plena. Lo más importante es recordar que no estás solo. Si crees que puedes estar experimentando síntomas de TOC, o conoces a alguien que lo esté pasando, no dudes en buscar ayuda. En Dilo Psicólogos estamos aquí para acompañarte en cada paso del camino.

Deja un comentario

1 ¿Cómo puedo ayudarte?